mayo 21, 2024

Tickling Stories

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El castigo de cosquillas de Adri (fanfiction)

Tiempo de lectura aprox: 9 minutos, 15 segundos

Un viernes por la noche, fui al gimnasio a hacer algo de ejercicio. Me senté en el asiento del banco de prensa y subí y bajé las pesas con las asas cubiertas de sudor de mis palmas. El gimnasio no estaba ocupado, pero tampoco estaba tranquilo. Algunas personas utilizaban la cinta de correr y esas extrañas máquinas de remo, pero aparte de eso, no estaba ocupado.

En la sala de fitness, al lado de la sala de máquinas, pude escuchar a ABBA en una radio y así supe que había una clase de Zuma o algo así. No pensé en lo que estaba sucediendo hasta que escuché una voz femenina familiar llamando;

«Bien hecho chicos, lo estáis haciendo bien, ahora vamos a mover esas piernas».

Dejé de hacer lo que estaba haciendo. «¡Conozco esa voz! Pensé.

Me levanté de mi asiento, me acerqué a la ventana y miré hacia dentro. Y allí estaba ella, una particular tigresa sexy.

«¡ADRI! Pensé. »¿Qué está haciendo aquí?…¡oh, esa gata está TAN muerta después de lo que ella y Clare me hicieron!»

Entonces se me ocurrió una idea… sonreí como un asesino en serie y me escabullí de vuelta al banco de musculación para continuar con mi entrenamiento y esperé a que terminara su clase.

Más tarde esa noche, todo el mundo había dejado el gimnasio. Incluyendo a todas las chicas sexys de la clase de Adri. Me senté en la esquina y las vi salir del vestuario para dejar el edificio.

«Super duper entrenamiento hoy chicos. Nos vemos la semana que viene», dijo Adri. Las chicas se despidieron y se fueron.

Podía oír el agua de la ducha en el vestuario de mujeres corriendo mientras Adri se lavaba. Salió del vestuario con una camiseta gris y un pantalón de pijama de yoga con gatitos. Luego se sacudió el pelo como un gato y su pelusa se esfumó.
Volvió a bajar a la sala de máquinas y se tumbó en la mesa de inversión de la esquina y se relajó tumbada.

Debe estar agotada. Tarde o temprano se quedará dormida». Pensé.

Durante un rato no pasó nada, sólo se relajó escribiendo en su teléfono. Me senté y esperé pacientemente tamborileando mis dedos en la alfombra.

Finalmente, dejó el teléfono y estiró los dedos de los pies. Me pregunté en qué estaría pensando al mirarlos.

Diez minutos después, la oí roncar tranquilamente. Por fin había llegado mi hora. La cámara de vigilancia me mostró caminando hacia una pila de cuerdas de saltar. Después de coger unos cuantos puñados, me acerqué a la mesa de inversión y levanté con cuidado sus pesados y musculosos brazos por encima de su cabeza y le quité la camiseta dejando al descubierto su sujetador. Luego até una cuerda de saltar alrededor de su pecho y debajo de la mesa atándola firme pero suavemente. Luego le até una segunda alrededor de la cintura, una tercera alrededor de los tobillos y finalmente una cuarta alrededor de las muñecas con los brazos por encima de la cabeza. Luego saqué una pluma y le hice cosquillas en la nariz con ella.

«Huevos despiertos y horneados», me reí.

Adri estornudó, se lamió la nariz y me miró preocupada y confusa.

«¡Hola Tigz!», dije alegremente.

»Hiiiii…. ¿cómo has llegado hasta aquí? y ¿por qué no puedo moverme?» preguntó Adri con miedo en su voz.

»Adri, es un gimnasio que cualquiera puede usar. Y me temo que NOSOTROS tenemos algunos asuntos pendientes». Sonreí y asentí con la cabeza como confirmando mis palabras.

»Esa no es mi principal duda» respondió la tigresa »Es por qué estoy atada a la mesa y por qué me miras así…»

Le di una palmadita suave en la cabeza »Para que me sea más fácil mi dulce gatita». Le contesté.

Adri empezó a ronronear por las palmaditas en la cabeza y movió la cola »OOOOOooohh rub rubs», sonrió.

»Disfruta mientras puedas porque tu castigo está cerca» dije riendo maliciosamente.

Adri abrió los ojos y se sonrojó. »…¿castigo?»

»Pues sí amor. Verás, después de ese truco que tú y Clare hicieron con el tanque y luego terminaron haciéndome cosquillas en equipo… simplemente no puedo dejar que te salgas con la tuya…» Le expliqué mientras daba unos pasos hacia atrás.
»¿Alguna última palabra?» Le pregunté.

Adri tragó saliva »Lo siento… por favor, perdóname, sólo soy una gatita» respondió con esperanza en sus ojos.

Me reí como un asesino y luego chasqueé los dedos y caminé lentamente hacia ella moviendo los dedos »¡Aquí gatito gatito gatito… Aquí gatito gatito gatito!»

Adri chilló y se sonrojó mientras se retorcía tratando de escapar de sus ataduras. Intentó cubrirse con su cola aunque fue inútil. Incluso dobló los dedos de los pies.

«¡Ahhh, no, no, no!», chilló.

«Sí, sí, sí», respondí sádicamente. Me acerqué a ella y le rasqué suavemente una costilla con el dedo. Adri chilló de nuevo y se estremeció tratando de escapar. Intentó enroscar su cola sobre ella para tratar de aliviar la sensación de cosquilleo. Pero fue inútil.

Le aparté la cola y utilicé los diez dedos para rasparle ligeramente la caja torácica.

»Nohohohoh, por favor, no hay cosquillas, las odio», gritó Adri mientras se retorcía en sus ataduras tratando de escapar.

»Coochie coochie coo little kitten» me reí.

«¡Grrr, no me hables como a un bebé!», gruñó.

»Awww» hice un mohín de burla.

Lo digo en serio… no me hagas cosquillas ni me hables como a un bebé», gritó mientras le clavaba los dedos en las costillas. Podía sentir su cálido pelaje deslizándose entre mis dedos con sus apretados músculos debajo.

«¡Estás tan caliente! ¡¡¡¡Sonreí »Coochie coochie coochie coochie coochie cooooooo!!!! «¡Gatito, gatito, gatito, gatito, gatito!

Esto fue demasiado para Adri. »OMG CÁLLATE HAHAHAHAHA» se sonrojó mientras reía sin poder evitarlo.

Entonces me acerqué a ella por detrás y hundí mis manos en sus axilas

»¿Cuántos ratones has cazado hoy gato? jajaja» le pregunté burlándome de ella.

»Tú serás la siguiente, niña dahaharn jejeje» respondió Adri.

«Perra, tengo 22 años, tú pierdes», respondí riendo como Skeletor.

Entonces bajé hasta su estómago y le clavé todos mis dedos en su barriga mordiendo su mochila.

»¿Quieres un platito de leche, gatita? mwahahahahaha» me reí atormentadamente.

Adri se volvió loco y empezó a suplicar y gritar entre risas.

¡»OHOHOHOH GOHOHOHOD NOHOHOHT THERE! JEJEJE STAHAHAHAP!!!!»

Me detuve. »Tú espera ahí» le dije disparando mi dedo como una pistola.

Volví a mi bolsa de viaje y saqué un cepillo de dientes eléctrico. Lo encendí y se lo metí en la oreja.

Adri estalló en carcajadas y trató desesperadamente de agachar las orejas.

»NOOHOHOHOH NOHOHOHT THERE!!!!»

«Oh, sí, ahí», respondí sonriendo. Entonces saqué la pluma de antes y le hice cosquillas en el ombligo al mismo tiempo.

»AHAHAHA STOHOHOHOP POR FAVOR, TENGO DEMASIADAS COSQUILLAS» Adri gritó tratando de aspirar su vientre. En realidad estaba disfrutando secretamente de todo esto a pesar del incesante zumbido en sus oídos.

»Kichi kichi kichi kitty kitty». Dije burlonamente.

Adri se volvió loca de la risa y empezó a lagrimear tratando de sacudir su cuerpo e intentando, sin conseguirlo, hacerse la dura mientras reía.

Le quité el cepillo de dientes de la oreja. »Daaawww pwease Waugh wittle kitten». Me burlé mojando el cepillo de dientes en su ombligo.

Adri lloró de risa un poco más y se sonrojó de un rojo intenso.

«¿Dónde está tu amiga Alisa, eh? mwahahaha» y empecé a hacerle cosquillas en el cuello con la pluma.

«STOHOHOHP, POR FAVOR, TE LO RUEGO».

Me reí en respuesta. Entonces dejé el cepillo de dientes y la pluma y bajé a sus patas. Sus gigantescas patas se enroscaron tratando de bloquear lo que fuera que planeaba hacerle.

«No puedes taparlas de mí», me reí evasivamente.

Saqué una botella de aceite para bebés y se la froté en las patas.

»Ooooh… ¡Hey! aléjate de mis niñas» gritó Adri.

»Awwww ¿qué pasa? ¿la gatita tiene miedo del cepillo?»

Adri movió los ojos. «¿Cepillo?», gimió.

«¡Ups, quise decir ….FOOTbrush!

Saqué un cepillo para el pelo y le restregué las plantas de los pies con él

¡¡¡»AAAAAAAY JAJAJAJAJAJAJAJA NOHOHOHO POR FAVOR NO EL FEEHEEHEEHEET!!! HAHAHAHAHAHAHA» Adri gritó mientras movía los pies y movía los dedos con desesperación.

»¡Cochie coochie coooo! sí ríe mi dulce tigresa!» Dije por encima de su risa.

Le froté los pies durante 20 minutos y luego cogí el cepillo de dientes eléctrico y la pluma y le hice cosquillas debajo de los dedos del pie derecho con la pluma mientras le hacía cosquillas en el talón izquierdo con el cepillo de dientes.

Adri no pudo soportarlo y suplicó mientras movía los dedos de los pies y los separaba

»NOHOHOHOHOH ME ESTOY VOLVIENDO LOCA POR FAVOR STAHAHAHAHAHAP IM SORRYHYHYHYHY!!!»

«No deberías haberme hecho cosquillas», le contesté.

Entonces puse el cepillo de dientes eléctrico entre sus dedos y dejé caer la pluma usando mis dedos para hacer cosquillas en forma de araña en su pie desde debajo de los dedos hasta el talón y de nuevo hacia arriba.

La risa de Adri fue como música para mis oídos, aunque parecía desesperada e histérica, estaba disfrutando secretamente de la atención que estaban recibiendo sus pies.

¡¡¡¡¡»POR FAVOR, PERDÓNAME, NUNCA LO VOLVERÉ A HACER» !!!!!

Yo solo negué con la cabeza »Lo siento tigz pero eso es lo que te toca».

Después de 20 minutos más de cosquillas en los pies, me subí a la mesa y me puse a horcajadas sobre su cintura. Moví mis dedos y amasé sus costados como si fuera masa.

Adri no tenía tantas cosquillas ahí y se limitó a ronronear intentando que no se notara que le gustaba.

Me detuve y saqué una navaja de afeitar, entonces procedí a afeitar el pelaje de sus brazos. Luego tomé el aceite de bebé y lo froté en sus escupitajos afeitados y empecé a hacerle cosquillas con la araña en sus axilas aceitosas ahora afeitadas.

Adri hizo un ruido extraño que sonó como un rugido mezclado con risa.

Después de hacerle cosquillas allí durante 10 minutos, me bajé de ella y me puse detrás de su cabeza. Tomé dos de mis dedos y comencé a trazar ligeros círculos en las palmas de sus patas y comencé a cantar…

«El oso de peluche da vueltas y vueltas por el jardín». Luego bajé dos dedos hasta sus antebrazos.

«Un paso…

Luego los bajé hasta sus musculosos bíceps.

»Dos pasos…aaaaand….»

»Go fuck yuorself» terminó Adri riéndose maliciosamente.

Fruncí el ceño al mirarla: «¡¡¡¡Te hace tilín ahí abajo!!!».

Clavé mis dedos en sus aceitosas axilas calvas.

Adri chilló de risa y movió la cola sin poder evitarlo

»¡¡¡FUHUHUHUCK YOUHOUHOUHOUHOUHOUHOU VOY A MATARTE DESPUÉS DE THIHIHIHS HAHAHAHAHAH¬!!!» Chilló.

»No si yo te mato primero» le respondí.

»JAJAJAJA ¿POR QUÉ IBAS A MATARME JEJEJE? IHIHIHM ¡MUY LINDO! HEHEHEHE!!»

»Intentaste matarme» le contesté mientras me subía de nuevo a la mesa montando a horcajadas sobre su cintura. Entonces empecé a hacerle cosquillas con la araña en su apretado, suave y musculoso cuello».

»¡¡¡JAJAJA NUHUHUHU NUNCA LO HICE!!!» Adri gritó mientras intentaba rizar el cuello.

»Eso fue un truco tan malo que ustedes dos hicieron y ahora deben sufrir»

Adri se sonrojó y ronroneó mientras reía. Enroscó su cola alrededor de mi muñeca.

Tuve que admitir… que me sentí un poco excitado al hacerle cosquillas en el cuello, pero reprimí esos sentimientos y le hice cosquillas viciosas en la garganta.

Adri curvó su cuello una vez más tratando de aliviar el cosquilleo y curvó sus orejas sintiéndose atrapada pero también complacida.

Yo también su cola y le hice cosquillas con ella en la axila derecha.

Adri chilló de risa al ver que le hacían cosquillas en la axila

»¡¡¡NO LA COLA PLEAHEAHEASE NADA BUHUHUHT THAHAHAHAT!!!»

Sonreí y le besé la nariz. Luego me bajé de ella y empecé a masticar su paquete de seis con mis manos

»¡Pacman ha venido de visita!» Dije riendo.

«¡NO, ESPERA! ¿Qué estás…? NOHOHOHOHOHOHO AHAHAHAHAHA NO LOS PACKS POR FAVOR QUE HACE MUCHAS COSQUILLAS HAHAHAHAHAHAHAHA!!!!!!»

Adri se volvió loco de risa. Las lágrimas caían como cascadas por sus mejillas anaranjadas y peludas. Se sintió un poco bien y refrescante ya que acababa de terminar de ejercitarlas.

«Piensa en ello como una sesión de entrenamiento con cosquillas», me reí. «¡Debes trabajar esos sexys abdominales de tigre después de todo!

Garabateé mis dedos AAAALLL sobre su barriga.

Adri se rió como una maníaca y se sintió loca y algo excitada por el bondage extremo. Intentó golpear mis manos con su cola pero fue inútil.

»NOHOHOHOHOHOHO VOY A INSAHAHAHAHANE EVAN PLEAHEAHEAHEAHEAHEAHEASE!!»

«No», sonreí.

Le hice cosquillas en la barriga durante 20 minutos y luego paré. Luego me acerqué a ella y empecé a apretar y manosear suavemente sus sexys antebrazos rayados.

»Ahora, mi mascota… ¿Dónde debo hacerte cosquillas ahora? ¿Eh? Pregunté sonriendo maliciosamente.

Adri se quedó sin aliento. «Ahahaha….ahh… ¡cuello!… Sé que te gusta», respondió reflejando mi sonrisa. Comenzó a tensar los músculos de sus antebrazos.

«mmmmmmm me gusta tu cuello» …. también me gustan tus brazos. Pero basta de hablar. Tu castigo está lejos de terminar.

Entonces volví a garabatear mis dedos en su cuello.

»Mhmhmhmhmhm que hace cosquillas jejejeje» Adri rió mientras ronroneaba fuerte.

»No te pongas demasiado cómoda gatita. Vas a sufrir mucho por tu incompetencia con ese oso entrometido».

Respiré hondo y le soplé una frambuesa profunda en su vientre peludo.

«¡¡¡BWAHAHAHAHAHAHAHAHA OH GOHOHOHOD!!! Adri chilló.

Escupí un poco de pelo y entonces volví a coger mi pluma y usando la pluma, empecé a dibujar ligeros círculos en sus axilas.

Adri chilló con una intensa carcajada ya que la piel de sus axilas aún estaba grasosa por el aceite y algo de sudor.

»¡¡¡NOHOHOHOTO OTRA VEZ!!!» gritó.

»Cosquillas cosquillas cosquillas» dije clavando mis dedos en su caja torácica de nuevo.

»AHAHAHAHAHA NOHOHOHOHOHO STOHOHOP EHEHEHEHEHEHEHE!!!»

Me detuve y sonreí como un loco.

Adri jadeó de cansancio y me devolvió la sonrisa.

De repente, siseé como un vampiro y me puse a horcajadas sobre su cintura por tercera vez.

Adri se asustó »¡El cuello no… espera… por favor!»

No le hice caso y comencé a mordisquear el lado derecho de su cuello.

Adri rodeó mi cintura con su cola y me tiró encima de ella atándonos juntos.

»je je je». Llama a Alisa para que te ayude, no puede salvarte», susurré burlonamente.

Adri me devolvió la sonrisa

»No puedes aguantar tu enamoramiento de mí… quitarme te entristecerá» dijo guiñando un ojo.

»He dicho que pidas ayuda» le contesté.

»No quiero» respondió Adri sacando la lengua.

»¡No desobedezcas a tu amo gatito!» Entonces procedí a mordisquear el lado izquierdo de su cuello.

»Ahahahahahaha mmmph la gatita quiere atención» se burló Adri.

Mordisqueé su cuello más intensamente mientras apretaba suavemente sus musculosos antebrazos.

Adri ronroneaba más y más fuerte cada vez que la mordisqueaba.

«Nadie te ayudará, Tigre. Eres mi esclavo y morirás riendo je je je».

»Morir sería una aventura muy grande» respondió Adri guiñándome un ojo.

Le mordisqueé las orejas y le garabateé el cuello al mismo tiempo.

Adri se limitó a chillar y a gemir de placer.

«¿Lo sientes? Le pregunté en voz baja.

»No» respondió Adri mientras empezaba a mordisquearme las orejas.

Yo moví el ojo »¡Eso es!»

Le soplé una feroz e intensa frambuesa en el cuello. Esto hizo que Adri volviera a reírse.

»¡¡¡NOHOHOHOHOHO AAAIEEEHEHEHE!!!»

»¿Ya lo sientes?»

»NOHOHOHO»

»¡Muy bien, sufrirás!»

Le apreté las costillas.

«¡¡¡EEP NU SORRY HAHAHAHAHAHA Ihihihill dohohoho anythihihihihing!!! Adri chilló.

»Demasiado tarde, de todas formas ya llegabas demasiado tarde» le dije.

Adri se rió y luego se sonrojó y me hizo ojitos de gatito.

«¡Pero tú me quieres!

Me sonrojé. «¡Basta de hablar! Le hice cosquillas más rápido.

Adri se retorcía como un gusano riendo más y más mientras mantenía sus lindos ojos de gatita.

»AHAHAHAHA I WUV YOUHOUHOUHOU!»

»¡Shadap!» Grité tratando de resistir sus burlas.

Pronto empezó a sentirse mareada.

»AHAHAHAHAHA HAHAHAHAHAHA STOHOHP IM BLACKING OUHOUHOUHOUHOUT!!»

No presté atención y seguí con ello.

«HAHAHAHA….HAHAHA…HA…Ehhhhhh….. Adri se desmayó con una sonrisa bobalicona en la cara.

Incliné la cabeza mirándola. Entonces comprobé su pulso… Seguía respirando bien.

Miré de lado a lado antes de besar su esponjosa mejilla.

»Lo siento tigz. Pero este fue tu castigo…. Sabes… tienes razón. Me gustas un poco».

Le acaricié el pelo y luego me bajé de ella, la desaté y la dejé allí durmiendo tranquilamente en la mesa de inversión. Le di un último beso y un golpe en la nariz antes de salir del gimnasio con mi bolsa de viaje y todas las herramientas dentro de ella.

Cuando salí del edificio. Adri abrió un ojo.

»mmmmm…yo también te quiero rubito….ZZZzzzzzzzzz»

FIN.

Tomado de internet y traducido para el blog

 

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