mayo 13, 2024

Tickling Stories

Historias de Cosquillas. Somos parte de la comunidad en español en Telegram – LTC.

Serie como transportador (parte 1)

Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 2 segundos

En el año 2002, no pude estudiar en la Universidad por problemas económicos y debido a esto, empecé a buscar trabajo en todos lados, pero en aquella época la situación estaba un poco difícil para conseguir empleo.

Fue entonces que decidí ofrecer mis servicios de transportador con el carro de mi papá.



Mi primera clienta era una señora de unos 42 años aproximadamente, muy bonita, cabello castaño corto, cuerpo de gimnasio, tez clara, tal y como dije anteriormente muy simpática.

Nuestra protagonista en esta historia, se llama Lyz Karime, ella se desempeñaba en aquella época como asistente de gerencia en una empresa de aseguradora muy conocida, sin embargo voy a omitir el nombre de la empresa por razones de seguridad.

Yo la transportaba todos los días en la mañana a las 6:30 am y después la recogía en la noche a las 6:00 pm, era una rutina de lunes a viernes.

Cierto día decidí arriesgarme a averiguar si era o no cosquillosa, por lo que me animé mientras iba conduciendo, a picarle las costillas, su reacción fue inmediata.

Luz Karime: jajajaja… noooo… 
Yo: y ese grito? qué pasó?
LK: tengo muchas cosquillas ahí…
Y: en serio?

Acto seguido, mientras conducía con la mano izquierda, con la mano derecha seguí picándole las costillas y la cintura, mientras que Luz Karime únicamente se reía.

LK: jajajaja… noooo… oyeee… jajajajaja…

En vista que Luz Karime estaba experimentando muchas cosquillas por parte mía, decidí parquear el carro y probar las cosquillas en otras partes de su cuerpo.

Empecé a apretarle las rodillas y la cintura, mientras Luz Karime reía y reía, además cabe recordar que se encontraba con el cinturón de seguridad puesto, por lo tanto estaba entre comillas «amarrada».

La risa de Luz Karime no se hacía esperar, además de las señales de desespero.

LK: jajajaja… jajajaja… jajajaja… jajajaja… jajajaja… jajajaja… 

Mientras Luz Karime se movía de un lado a otro en la silla intentando huir de las cosquillas que yo le estaba haciendo en ese momento, me bajé a sus pies y le quité los zapatos que traía puestos, debo decir que ese fue el mejor momento de la sesión, debido a que como buen fetichista de pies y de cosquillas, al ver los pies de Luz Karime blancos y con las uñas de los dedos pintadas de rojo, me gustaron mucho, así que no me aguanté ni un segundo y empecé a cosquillearle las plantas de los pies.

La risa de Luz Karime se incrementó y además ella intentaba quitarme de sus piernas para que yo no pudiera continuar haciéndole cosquillas en los pies.

LK: hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… 

Resultó que Luz Karime era hipercosquillosa en las plantas de los pies, y según ella, nadie, absolutamente nadie podía tocarle los pies; yo le pregunté si de pronto alguno de sus hijos le había hecho cosquillas antes en los pies, y me dijo que su hijo menor era el único que le hacía cosquillas en esa parte del cuerpo, cuándo ella estaba descuidada, de resto no dejaba que más nadie le tocara los pies, por ser demasiado cosquillosa.

Así que después de conversar nuevamente me agaché, le tomé los pies y empecé a cosquillearla nuevamente.

LK: hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… hahahahaha… 

Después de eso, suspendí la sesión de cosquillas, habían pasado cerca de 45 minutos desde que parquee el carro para hacerle cosquillas a Luz Karime, sin embargo debo decir que ha sido una de las mejores experiencias de cosquillas que he tenido.

Espero que les haya gustado la experiencia y nos leemos en la próxima.

Firmado: CQ

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